Un cortejo fúnebre acompañó al duque de Edimburgo en su último adiós durante la histórica ceremonia que comenzó en el patio del palacio de Windsor y al que solo asistieron 30 personas. Los restos mortales del duque se trasladaron en un Land Rover diseñado por él y la reina de Inglaterra recorrió el trayecto hasta la capilla en coche mientras que los hijos y nietos del duque, caminaron detrás del féretro en procesión. Harry volvió a encontrarse con su hermano Guillermo en el funeral luego de más de un año sin verse.

El Land Rover diseñado por el duque de Edimburgo que trasladó sus restos mortales | ¡HOLA! TV